Muchas personas anhelan la construcción de una vivienda unifamiliar para disfrutar de la independencia que otorga esta. Sin embargo, con el paso del tiempo una de las principales preocupaciones a las que se enfrenta el propietario de este tipo de hogar, es la aparición de fisura y grietas, ya que puede ser indicativa de problemas estructurales o de asentamiento del terreno.
Algunas fisuras son inofensivas y simplemente un signo de envejecimiento de la construcción. Por contra, la aparición de grietas puede ser diferente. Dependiendo de la gravedad, algunas grietas pueden sellarse con materiales flexibles como masilla o siliconas, o con materiales más rígidos como yeso o cemento. No obstante, otras son una señal de problemas más serios relacionados con la cimentación u otros agentes externos que requieren una reparación inmediata, con el objetivo de cortarlos de raíz.
Existen varios tipos de grietas que pueden surgir en una vivienda unifamiliar:
• Grietas verticales:
Suelen indicar un asentamiento diferencial del terreno. Si son pequeñas y uniformes son menos preocupantes.
• Grietas horizontales:
Estas pueden ser más graves, ya que se traduce en problemas de presión lateral sobre los muros, comprometiendo la estabilidad de la estructura.
• Grietas diagonales:
Suelen surgir debido a movimientos diferenciales del terreno o problemas estructurales en esquinas, marcos de puertas y ventanas.
• Grietas en escalera:
Se suelen dar en muros de mampostería y pueden causarse debido a problemas en los cimientos.
Causas más comunes de la aparición de grietas en una vivienda unifamiliar
Debido a las circunstancias del terreno de este tipo de construcciones, las zonas en las que se edifican y a las grandes dimensiones que suelen presentar, las causas más recurrentes para que aparezcan grietas en viviendas unifamiliares son:
• Asentamiento del terreno:
Este es uno de los motivos más comunes de la aparición de grietas. El suelo bajo la vivienda puede moverse o compactarse con el tiempo, causando desplazamientos en los cimientos y, en consecuencia, grietas en las paredes.
• Ampliación de la casa:
Este tipo de viviendas suelen contar con mucho espacio habitable, lo que propicia que los propietarios amplíen zonas aprovechables de la casa para ganar metros. Realizar esto sin asegurarse que la cimentación sea capaz de aguantar las nuevas cargas, puede producir grietas debido al hundimiento del terreno.
• Cambios de humedad y lavado del terreno:
La expansión y contracción del suelo debido a variaciones en la humedad pueden generar tensiones en la estructura de la vivienda, especialmente en suelos arcillosos. Las acumulaciones de agua pueden afectar al terreno, ya sean provenientes de la lluvia, de colectores de saneamiento de agua y fecales.
• Deficiencias en la construcción:
La mala calidad de los materiales, errores en el diseño o una ejecución inadecuada de la obra pueden provocar grietas. Estos problemas suelen aparecer poco después de la construcción.
• Movimiento sísmico:
Los terremotos y movimientos telúricos pueden causar grietas en las estructuras. Las viviendas unifamiliares en zonas sísmicas están especialmente en riesgo.
• Presencia de árboles cercanos:
Este tipo de casas tienen normalmente árboles alrededor, ya que son construidas en pequeñas o grandes parcelas independientes. Las raíces de algunos árboles pueden afectar de forma grave a la estabilidad de la estructura, generando grietas.
• Terreno a distintos niveles:
Las viviendas unifamiliares suelen ser construidas en zonas de campo que presentan suelos desnivelados o rellenos, problemas relacionados con el drenaje y una distribución desigual de las cargas. Esto ocasiona la aparición de grietas.
• Realización de excavaciones:
Al tener parcelas independientes, aquellas que son de grandes dimensiones permiten construir otras edificaciones dentro del terreno del propietario. No obstante, esto puede suponer la generación de vibraciones o eliminar parte del soporte natural del suelo que sostiene los cimientos de las casas vecinas, si estas están muy próximas a dicha excavación, creando grietas.
¿Cómo reparar las grietas de una vivienda unifamiliar?
Como se menciona anteriormente, la aparición de grietas en este tipo de construcciones puede deberse a problemas graves que urge solventar. Una solución que pasa por consolidar el terreno y realizar un recalce de la cimentación. GeoNovatek desempeña esta labor de manera eficaz ofreciendo varias opciones, paralizando el surgimiento de grietas en viviendas unifamiliares y asegurando que no aparezcan de nuevo. Las técnicas de GeoNovatek que resuelven los problemas de grietas de este tipo de hogares son:
• Resina expansiva HDR300:
Se mejora la capacidad portante del terreno inyectando dos componentes de la resina debajo de la cimentación. Cuando estos se combinan, se hinchan, propiciando que se llenen espacios vacíos.
• Micropilotes MP/60:
Estos elementos se hincan a presión bajo la cimentación. Gracias a ello, se transfiere el peso de la estructura a estratos de mayor profundidad y resistencia.
• Técnica mixta:
La consolidación del terreno y la capacidad portante está más que asegurada con la utilización simultánea de los micropilotes y la resina expansiva.
• Lift Pile:
Sistema patentado de GeoNovatek que levanta edificios asentados hasta nivelarlos. Para ello, se emplean micropilotes MP/60 en los que se adhiere un dispositivo de precarga regulable, el cual levanta las estructuras hasta recuperar su planicidad original.
Una vez reparadas, se antoja fundamental llevar a cabo un seguimiento periódico de las grietas en la vivienda unifamiliar para asegurarse que no vuelven a aparecer o empeorar.
En conclusión, la aparición de grietas en una vivienda unifamiliar puede ser signo de problemas estructurales que hay que reparar cuanto antes. La prevención y el mantenimiento regular son claves para mantener la integridad y seguridad de la vivienda, asegurando así la tranquilidad de sus habitantes.